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27 de junio de 2013

Les presentamos a Moro

La historia de Moro es una historia de superación. Él ingresó al salón hace varios meses pero recién ahora está listo para irse en adopción y en adopción muy muy especial. 

Moro llegó de la mano de proteccionistas independientes que nos pidieron ayuda. Resulta que una persona muy enferma, cruel y cobarde se divertía con un rifle de aire comprimido y su target eran los gatitos de las vías de Belgrano. Moro fue víctima de este ser horrible y estuvo herido e internado bastante complicado unos cuantos días. Luego de que le dieran en alta, ingresó a Gatitos de la Sarmiento.

Llegó muy enojado, molesto, frustrado, asustado y dolido. No es para menos, ¿no? Al principio este gatazo hermoso y peludo no nos dejaba acercanos a él ni siquiera para alimentarlo. Nos tenía terror. Pero nos las fuimos arreglando y hasta logramos desparasitarlo, despulgarlo y generar cierta confianza. Desde hace unos meses, aún con temor, nos deja estar a su lado: sentarnos y hablarle. Y hasta alguna que otra vez pudimos tocarlo. Lo que sí le gusta mucho mucho es jugar con su pelotita y charlar con los otros gatitos del salón (se lleva muy bien con otros felinos). Y a que no saben: a veces sale de su camita cosa que al principio era imposible.

Morito es un gato adulto de tres o cuatro años aproximadamente. Está castrado y es sensible al polvillo/ácaros (a veces tose). Es gigante y súper peludo, además de precioso. Tiene todo el potencial para ser un gran compañero y no nos olvidemos de que es un luchador y un sobreviviente. Estamos seguras de que con el tiempo va a volver a confiar en los humanos y hasta podrá ser un gatito socible.
Pero para lograr todo eso necesita toneladas de amor, de paciencia y de contención. Necesita una mano amorosa que lo ayude a animarse, a dejarse querer y a olvidar el dolor y el maltrato. Necesita un hogar cariñoso y alguien que lo ayude a recorrer todo este camino. 


Moro se merece una oportunidad de ser feliz y de ser amado. Se merece su tan ansiado final feliz. Se merece conocer el amor que un humano puede darle y disfrutarlo mucho. Nos encantaría ver a Moro feliz en un hogar haciendo fiaca en un sillón, durmiendo en la cama y recibiendo todo el cariño que le faltó durante mucho tiempo. Y él también lo desea, sus avances nos lo demuestran.

Si querés conocer a Moro, escribinos a gatitosdelasarmiento@gmail.com y si podés, ayudanos a difundir su historia.

¡Aguante Moro!




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